viernes, 11 de julio de 2014

Dos cuentos centroamericanos presentados por Glendy




LA ESCALERA
Claudio de Castro  nació en panamá el 3 de julio de 1957, pertenece a la novísima generación de escritores panameños.
El cuento trata de un  hombre que había sido invitado y en la invitación pedía puntualidad, vestido de etiqueta y la hora a la una en punto.  Es una historia en la que el invitado llego antes a la fiesta de la hora indicada, espero media hora antes de entrar a la mansión, cuando llego el momento de entrar, el mayordomo le dio la dirección como iba subir las escaleras, en ese momento él pensó, que raro que no han venido más invitados, siendo así voy a estar un rato mas porque no molestare a nadie. De repente escucho unas voces y gritos arriba entonces  le despertó la curiosidad y decidió subir, cuando  iba la cocinera le dijo que no subiera porque en ese intento se habían perdido tres y que nunca habían regresado, y dijo esta señora está loca.  Sin embargo  el tomo el riesgo de continuar su camino y arriesgarse a cualquier cosa. Subió las escaleras que eran en forma de laberinto ese lugar siempre pasaba iluminado nunca escurecía. Cuando llego al lugar del destino ya le tocaba regresar, pero en el regreso no encontraba la salida, siempre regresaba al mismo lugar , mientras tanto se encontró con un hombre llorando, desesperado  que no podía salir y que todos los intentos que había hecho eran en vano.  El hombre se detuvo un momento a estudiarlas escaleras y a pensar cómo iba hacer, luego recapacitó  en vendarse los ojos y bajo los escalones y cuando sintió que ya no habían mas gradas se quito la venda y comprobó que estaba en el vestíbulo de la mansión.
 Claudio Castro nos lleva a un mundo psicológico que provoca duda en el lector al momento de comprender la historia. Este cuento es un excelente texto, bien elaborado y con mensajes subjetivos ocultos, lo que nos transporta a crear en nuestra mente cada escena que el narrador relata. Historias como estas nos hacen sentir que en Centro América también hay buenos escritores capaces de engañar la  mente tal y como lo dice Cortázar en su narrativa, no es bueno comparar autores pero es interesante algunas veces, para enriquecer nuestro buen gusto como lectores.

El Pagano escrita por Rodrigo Rey Rosa, nació en la ciudad de Guatemala en 1958, donde curso sus estudios.
La historia trata de un  niño que el papa le decía que era un mentiroso, lo miraba casi con desprecio. Un día el muchachito se levanto  fue a ensillar una yegua negra  y al montar dejo de ser el hijo de su padre para convertirse en un guerrillero. El siempre cabalgaba hacia los montes que rodeaban la cuidad, se sentaba en lo alto a ver pasar todos los carros. Un día empujo una piedra y le cayó a un carro rojo que lo conducía una mujer. Alguien de los que iba lo señalo al niño y empezaron a seguirlo, cuando iba a montarse escucho una vos que le decía ¨yo te vi¨ se detuvo, era un niño idéntico a él, solo que descalzo; empezaron a debatir sobre lo sucedido, llegaron los hombres que lo iban siguiendo y el niño le echó la culpa al otro y se lo llevaron preso. Cuando llegó  a casa la mamá  le preguntó  qué le pasaba  le dijo, creo a ver matado una mujer, las hermanitas le decían júralo y él dijo que si, que había dejado caer una piedra. Pero al fin nadie le creyó, sabiendo que estaba diciendo la verdad.
Se nota a simple vista que el autor del cuento tuvo una buena influencia del novelista Paul Bowles, ya que organizo de una manera muy especial el cuento para darnos a conocer esta buena historia. Podemos compararla con los hechos que a diario ocurren en nuestra sociedad debido a que muchas veces, como dice el dicho ¨ Tiramos la piedra y escondemos la mano¨ y esto fue sin duda lo que ocurrió en historia , otro pago lo que el niño hizo . Sencillamente es un cuento que vale la pena leer y compartir con otros.

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